Comunidad

Cuenca designa al primer exorcista oficial en la ciudad

Francisco de Jesús Calle Calle, conocido cariñosamente como el «Padre Paco», ha sido nombrado como el primer exorcista oficial en la Arquidiócesis de Cuenca. Su designación resalta el resurgimiento de una práctica antigua en la Iglesia Católica, mientras se aborda con cautela la delicadeza de esta labor.

En una reciente entrevista, el Padre Paco compartió su comprensión sobre la práctica del exorcismo dentro del contexto espiritual y religioso.
Señaló que entre los signos visibles que podrían indicar la necesidad de un exorcismo se encuentran el hablar en lenguas desconocidas y manifestar una fuerza sobrehumana, que él describe como impresionante.

Monseñor Marcos Pérez, arzobispo de Cuenca, explicó que los sacerdotes parroquiales serán los primeros en identificar a aquellos que podrían requerir un exorcismo. Actuarán como filtros iniciales, evaluando cada caso antes de remitirlo al exorcista oficial de la diócesis. Solo cuando un caso carezca de explicación científica, se dirigirá al exorcista oficial.

El proceso de exorcismo involucra el uso de ornamentos sacerdotales, rituales específicos y oraciones adecuadas. Este acto, aunque antiguo, encuentra su lugar en el Siglo XXI como una práctica que la Iglesia Católica sigue reconociendo y abordando con seriedad en respuesta a ciertos fenómenos espirituales y psicológicos. El nombramiento del Padre Paco destaca este compromiso renovado con una práctica ancestral en la fe católica.